Krell fue criado en las Praderas de Arena en una tribu orca. Allí aprendió a sobrevivir y a combatir junto a sus parientes orcos. Él fue el hijo bastardo de un afamado guerrero de la tribu quien lo crió como su hijo mostrándolo al resto como el tesoro de una incursión a un poblado humano siempre relatando como violó a su madre humana y la mantuvo viva hasta su nacimiento.
Krell se mostro siempre feroz en combate y desde pequeño fue reconocido como un hábil, valeroso y tenaz guerrero. A temprana edad formo parte de las filas de combatientes de la tribu, ganándose el respeto de sus contrapartidas orcos. Sin embargo siempre fue desmerecido de entre la tribu por ser un bastardo de sangre impura.
Formó parte de la primera campaña de La Horda Orca quienes marcharon al sur en una puja territorial en contra de la tribu de humanos que vivían cerca del muro de hielo. La horda no fue bien organiza y preparada para el sometimiento del frio atroz ni para la larga duración de la contienda. La escasez de soldados y la falta de recursos obligo a la horda a retirarse. Sin embargo los humanos no estaban dispuestos a dejarlos escapar vivos. A cambio de sus vidas los orcos ofrecieron a varios de sus soldados como tributo y también parte de su riqueza. Entre lo orcos entregados como tributo, se entregó a Krell.
Krell cayó en manos de Fen Maharis un noble guerrero, quien lo crió como uno de los suyo y le enseño el arte del combate. Pero, Krell nunca pudo adoptar la forma de combatir humana ya que siempre que era superado en número o gravemente herido perdía el control de si mismo entrando en un estado de cólera golpeando brutalmente a sus oponentes. Fen Maharis también le enseño a apreciar las artes, a leer y a escribir, a sobrevivir en el helado sur, y a controlar su furia. Rápidamente los humanos aceptaron a Krell y él se sintió parte de la tribu olvidando así parte de sus raíces orcas. En la tribu humana Krell se hizo amigo de Rall Endrino un humano hijo del líder de la tribu. Krell fue designado como escolta personal de Rall durante la segunda incursión orca salvándole la vida en combate más de una vez.
Una vez terminada la segunda guerra contra los orcos, Rall Endrino pidió a los altos líderes de la tribu que le concedieran la libertad a Krell quien cumplió con su palabra defendiéndolo a él y a la tribu. Los líderes decidieron otorgarle la libertad pero a cambio de ello Krell tendría que superar una prueba. La prueba consistía en enfrentarse a un dragón blanco que saqueaba con regularidad algunas aldeas cercanas a la tribu. La prueba fue impuesta en para probar el valor y la lealtad de Krell, además de que varios de los lideres esperaban con ansias la muerte de la bestia gris, como lo denominaban ellos.
Krell dispuesto a luchar para recuperar su libertad y para demostrar su honor acepta la prueba. Una vez realizado los preparativos decide comenzar su viaje, pero al salir de la tribu Rall decide ayudarlo como retribución a su leal servicio. También antes de partir, Fen Maharis, le otorga a Krell un arma forjada por el mejor herrero de la tribu e imbuida en poderosa magia por parte del hechicero local, diciéndole “si obtienes tu libertad, obtienes el arma y ganas tu honor”. Así comienzan su viaje hacia la guarida del dragón en el muro de hielo. Tardan varias semanas en llegar a la guarida. Una vez allí libran una feroz batalla contra el dragón blanco hasta que logran derrotarlo. Krell le corta la cabeza como muestra de su hazaña mientras que Rall toma el tesoro para luego repartirlo entre ambos. Su regreso triunfante a la ladea le otorga a Krell su libertad, honor y renombre, desde ese momento es conocido como “Krell Matadragones”.
Rall Endrino le propone a Krell irse de aventuras hacia el norte aprovechando la riqueza del tesoro del dragón. Krell decide que es momento de dejar la tribu para buscar su lugar en el mundo. Así ambos se convierten en compañeros de aventuras.
Emprenden viaje hacia el norte por mar y tierra, gastando su fortuna en bebidas y mujeres. Luchando por temporadas como mercenarios y enfrentándose a monstruos o simples ladrones.
Logran comprar varias mujerzuelas y emprenden un negocio de prostitutas mezclando sus habilidades, Rall era el comerciante y Krell mantenía el orden. Sin embargo al tiempo Krell se ve absorbido por una vida de lujos y placeres desmedidos, atrapado en el alcohol y la lujuria. Rall decide que lo mejor es estar en movimiento ya que eso distraía a Krell de la bebida y la carne. Al llegar a Cincel, Rall decide que no pueden seguir juntos, ya que Krell no es más de utilidad y perjudica más al negocio de lo que puede lograr beneficiarlo. Krell está de acuerdo y decide unirse a un grupo de aventureros que parecen aceptarlo, claro está que ellos desconocen el problema de adicción de Krell. Estos aventureros se dirigían hacia el sudoeste, a Puerto de Escala. Krell arregla su negocio con Rall y promete volver recuperado de sus adicciones y problemas.
4 comentarios:
Vamos todavía!!! Qué copada la historia!!! Es como si todo se fuera armando solito...
Bonito, bastante bonito...
esta bueno pablin, podrias sacar algo mas grande de esa historia pensanlo
Gracias por el coment cristian! vamos a pensarlo y veo si hago algo mas grande con esto :D
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